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No tuve opción, soy una mujer, las mujeres deben ser más hábiles que los hombres, ellos pueden arruinar nuestra reputación con pocas palabras. Así que no solo tuve que inventarme, si no inventar formas insospechadas de huir y he tenido éxito porque...Siempre supe que nací para dominar a los hombres y vengar mi sexo. Introducida en el mundo que mis padres planearon para mí, estaba sometida a las condiciones que me obligaran, al silencio y a la inactividad, he sabido aprovecharme de ambos para observar y reflexionar. Mientras que se me creía confundida o distraída, yo ponía gran esmero en oír los que se me pretendían ocultar. Aprendí a dominar mis gestos a través de mi cara. Cuando algo me molestaba, trataba de transformarlo en seriedad y aun en alegría. Practique la indiferencia, aprendí a parecer alegre al tiempo que me clavaba un tenedor bajo la mesa. Me convertí... En una virtuosa del engaño, si así se le llama. No buscaba el placer sino el conocimiento. Consulte un amigo experto en el arte del teatro para saber como aparentar con un filósofo para saber que pensar y con un novelista para aprender hasta donde llegar. Y al final destile todo a un solo principio sencillo. "Ganar o Morir"